Una charla de empresa, un discurso emotivo y una idea alocada: un cóctel explosivo
Después de un gran año de resultados, Igor Krezic, fundador y jefe de la compañía de software NSoft, decidió reunir a todos sus trabajadores para ofrecerles una motivadora y emotiva charla, en la que dio las gracias a sus trabajadores por haber conseguido unos números inigualables.
Una de las compañías líderes de software, con sede en Bosnia, celebraba de esta manera un día tan especial... hasta que pasó algo inesperado. Krezic, tras acabar su discurso, se dirigió en silencio al balcón y, ante la mirada de todos sus empleados, no dudó en saltar al vacío.
O, mejor dicho, a lo que todo el mundo creía que era el vacío salvo él, que había decidido gastar una broma pesada a sus compañeros. Con un colchón inflable en el suelo, Krezic amortiguó su caída en la colchoneta, mientras el resto de personal se llevaba las manos a la cabeza ante lo que acababa de pasar.
Unos decidieron bajar corriendo a la calle; otros, asomarse al balcón; y, los más, se echaron las manos a la cabeza ante lo que acababa de suceder frente a sus ojos. Escasos segundos después, todos descubrieron que habían sido víctimas de una broma pesada por parte de su jefe.