Sin embargo, una familia que estaba cenando en el restaurante junto a ellos, le pidió al camarero que les diera otra mesa, lejos de Kim y su hijo.
El padre de la familia incluso dijo que los niños como Milo ¡no deberían cenar en lugares públicos!
Kim simplemente se sorprendió por el comportamiento grosero de esta familia, pero más tarde uno de los camareros hizo algo digno de aplausos.
Michael García escuchó lo que decían estos malos clientes, se negó a servirles y los llevó a la salida.
“¿Cómo pueden decir eso?” exclamó Michael. “¿Cómo pueden decir algo así sobre este hermoso ángel de 5 años?”
Cuando el camarero regresó, los demás clientes lo recibieron con aplausos.
“Me impresionó que alguien se arriesgara así para defender a alguien más”, dijo Kim. “Sé que Michael lo hizo con el corazón y de buena fe”.
Kim espera que su historia anime a otros a ayudar y defender a aquellos que no pueden hacerlo por sí mismos.